Batalla de Linuesa (21 de diciembre de 1361)

Dentro de los conflictos fronterizos entre nazaríes y cristianos se sucede esta batalla de Linuesa, en el municipio jienense de Huesa. A finales de 1361, las tropas nazaríes compuestas por 600 caballeros y 2000 peones, invadieron las tierras del adelantamiento de Cazorla (un señorío que Fernando III había concedido al arzobispado de Toledo en 1231) e incendiaron el municipio de Peal de Becerro, al tiempo que se apoderaban de numerosos cautivos y una gran cantidad de ganado.

Las Órdenes Militares surgen en Europa a comienzos del siglo
XII como consecuencia de las peregrinaciones a Tierra Santa y
de las Cruzadas, para defender la fe cristiana frente al Islam,
conjugando elementos religiosos y militares: la Orden del
Temple y la de San Juan son las primeras en fundarse y
pronto comienzan a proliferar tambien en la peninsula
Iberica, como en la actual provincia de Ciudad Real se
 asentaron la Orden de Calatrava (Campo de Calatrava), la
de San Juan (Campo de San Juan) y la de Santiago
(Mancha Alta y Campo de Montiel)

Cuando los comandantes cristianos Diego García de Padilla, maestre de la Orden de Calatrava, Enrique Enríquez el Mozo, adelantado mayor de la frontera de Andalucía y Men Rodríguez de Biedma, caudillo mayor del obispado de Jaén tuvieron conocimiento de lo sucedido reunieron a sus tropas y se apoderaron de un paso del río Guadiana Menor a la espera de que el ejército nazarí pasara por allí para volver a Granada. Según recoge la llamada "Crónica del rey Pedro", pocos musulmanes escaparon con vida de ese enfrentamiento que se libró el 21 de diciembre de 1361 en un lugar llamado Linuesa.

Tras tomar Calatrava la Vieja (Carrión de Calatrava) en 1147,
Alfonso VII encarga su defensa a los templarios quienes años
más tarde se la devuelven al nuevo rey de Castilla, Sancho Ill,
que la entregará al abad del monasterio cisterciense de Santa
María de Fitero, quien funda la Orden de Calatrava (1158);
tras la victoria de las Navas de Tolosa, la Orden de Calatrava
funda el Sacro Convento y Castillo de Calatrava la Nueva
(Aldea del Rey) que se convertira en su nueva sede

Al conocer Pedro I de Castilla la victoria de sus tropas frente a las fuerzas nazaríes de Mohammed VI "El Bermejo", ordenó que le entregasen a él los cautivos musulmanes que habían hecho durante la batalla, prometiendo compensar a los comandantes al principio nombrados la suma de trescientos maravedís, lo que no cumplió, provocando el enfado de los mismos comandantes que poco después serían derrotados en la batalla de Guadix en enero de 1362.

Comentarios

Entradas populares

El legado nazarí por el mundo