Bezmiliana (Rincón de la Victoria)

Vista aérea de la zona del Castillo de Bezmiliana, un
yacimiento de importancia trascendental para
entender la historia de la ocupación andalusí en
esta parte de la provincia de Málaga 

Cerámica andalusí hallada en Bezmiliana y expuesta
en el Museo Arqueológico de Vélez-Málaga 

En el siglo IX ya existía una alquería (garya) y poco después se erigió una fortaleza (his) en su zona mas elevada, conocida como loma de de El Castillón. El castillo (no confundirlo con el Fuerte de Bezmiliana del siglo XVIII), situado al norte del actual núcleo de población de Rincón de la Victoria, aprovecha toda la plataforma superior de la colina, que queda definida por laderas abruptas. Tuvo una traza regular de planta poligonal adaptada al terreno, con torres cuadradas en sus ángulos o flanqueando las puertas. A partir de la segunda mitad el siglo IX la ciudad experimenta un importante crecimiento, expandiéndose hacia la zona de la costa.

Cerámica almohade hallada en el yacimiento 
de Bezmiliana (Rincón de la Victoria)

Bezmiliana es también conocida como el despoblado de Bezmiliana o el yacimiento de Bezmiliana, tratándose de una zona arqueológica y antigua localidad situada en el municipio español de Rincón de la Victoria, en la provincia de Málaga. El yacimiento se ubica en tres áreas diferenciadas que son el resultado de distintas intervenciones arqueológicas donde se han documentado espacios muy concretos del tejido urbano de la antigua medina.

Restos arqueológicos andalusíes de cerámica 
procedentes de la zona arqueológica de Bezmiliana
y expuestos en el Museo de Vélez-Málaga

Los restos más significativos que se han mantenido hasta la actualidad de este núcleo urbano se corresponden fundamentalmente con espacios públicos como los contenidos en la denominada Zona 1. En este ámbito se localiza la base cuadrangular del alminar de una de las mezquitas de la ciudad hispanomusulmana (que tras la conquista cristiana se reconvierte en elemento de corte defensivo quizá con el doble propósito de erradicar el carácter simbólico del edificio y de utilizar su disposición estratégica sobre un promontorio), defendido por un revellín de sillarejo labrado en lumaquela local de época cristiana, así como un gran aljibe (con sección cuadrangular y fábrica de mampostería de sillarejos y ladrillos unidos con un fuerte mortero de cal, y de 5 por 2,5 metros de dimensión, cubierto por bóveda de cañón irregular), posiblemente relacionado con dicha mezquita, así como un gran patio también relacionado con la estructura religiosa islámica que al final fue repavimentado en. época cristiana con una solería de pequeños cantos. Precisamente la excavación del espacio correspondiente a la mezquita reveló niveles de gran complejidad estructural, con demoliciones, integraciones y obras de nueva planta que definen la evolución histórica del espacio excavado.

A partir del siglo X hasta el siglo XII se 
desarrolla la población del Castillo de Bezmiliana 
que crece y se expande a los pies del castillo como
evidencian las diferentes arqueológicas 

Las intervenciones arqueológicas en la Zona 2 han permitido identificar la presencia de abundantes elementos estructurales correspondientes al tejido urbano tanto de la ciudad hispanomusulmana como cristiana. La secuencia estratigráfica en este sector se inicia en época emiral y califal con restos arqueológicos de menor entidad comparados con los de las etapas almohade y nazarí donde los niveles se conservan en mejor estado.

Candil de época nazarí 

Cántaro de arcilla (siglos XIV-XV) 
hallado en Bezmiliana 

A estas últimas etapas se adscriben los restos de una edificación articulada en torno a un espacio interpretado como patio, posiblemente central, alrededor del cual se disponen las diferentes estancias (una de ellas con un amplio vano que incluso parece haber contado con un parteluz central). Esta edificación se conserva a cota de zócalos sobre los que muy probablemente, según interpretan sus excavadores, se elevaban cuerpos de tapial. A pesar de que no se han mantenido los suelos, la fina fábrica de mampostería, cuidada y trabada con mortero de cal, conservaba restos parciales del enlucido original; en otro de los edificios documentados sí se reveló la existencia de suelos de mortero de cal en una de las estancias. Este edificio descrito se separa al sur por un espacio de tránsito que se caracteriza por la presencia de una atarjea de saneamiento, posiblemente una calle.

Monedas de diferente épocas, puntas de flechas
y otros elementos metálicos hallados en las
excavaciones del Castillo de Bezmiliana
y expuestos en el Museo de Vélez-Málaga

En la Zona 3, se localiza parte de la necrópolis medieval musulmana (maqbara) de Bezmiliana, que se desarrolla desde el siglo X al XV. La tipología más común de tumba es la fosa simple, seguida de la fosa cubierta con lajas de pizarra y tejas. También se ha documentado una tumba delimitada por mampuestos y ladrillos. Este cementerio se asienta sobre un gran edificio de época romana donde se han registrado varias fases: la primera se adscribe al siglo II d. C. (realizada con grandes sillares, posiblemente reutilizados, contando con suelos de opus signinum) y una seguna ya en el siglo III d. C. para ser el edificio reestructurado y ampliado hacia el oeste, empleando en este caso muros con fábrica de mampostería, pudiendo ser concebida en principio como unas grandes termas privadas que, en su última fase, se adaptan como almacén de pesca, siendo finalmente abandonado en el siglo V d. C.

La puerta principal de acceso al castillo, de dos metros de ancho, se ubica al sureste de la estructura; se trataría de una puerta monumental, con jambas de sillares, y posiblemente terminada mediante arco de herradura. Delante se construyó una barbacana o muro defensivo paralelo al lienzo que dificulta el acceso al recinto y forzaba la entrada en recodo, sistema que fue importado por los almohades.

Planta trapezoidal del castillo de Bezmiliana, adaptándose 
al terreno escarpado; posee siete lienzos de distinto largo
en los que sus ángulos de unión se refuerzan con torres
cuadradas y macizas de dos metros por dos, excepto una
cuya planta es circular 

Existe otra puerta secundaria en el lado noroeste, mucho más simple y con acceso directo desde el exterior y otra posible entrada en el lado sur. El material utilizado es mayoritariamente mampostería de mediano tamaño, bien encintada en algunos lugares y en otros alterna con lascas más planas también encintadas, quedando constancia en bastantes zonas del enfoscado del alzado con las características señales, que servirían para poder incorporar una segunda capa de materiales posiblemente decorativos.

Fragmento cerámico con escritura árabe pintura o
estampillados en la inscripción inferior se
 lee "la felicidad eterna" (siglos XII-XIV) hallado
 en Bezmiliana (Rincón de la Victoria)

Es a partir del siglo XV cuando se inicia un rápido proceso de despoblación y abandono de Bezmiliana. Gracias a los restos de viviendas encontradas sabemos que el interior del castillo fue habitado durante el periodo nazarí. A finales del siglo XV, los Reyes Católicos encomiendan al Bachiller Serrano la refortificación y repoblación del lugar aunque fue un plan que fracasó en poco tiempo. Las excavaciones más recientes han permitido verificar la fuerte incidencia de las estructuras de época medieval cristiana en algunos puntos de la ciudad sobre estructuras hispanomusulmanas, siendo las infraestructuras mejor conservadas, como las de la Zona 2, donde se comprobó en las intervenciones realizadas que tras la conquista cristiana fracasan varios intentos de repoblamiento, localizándose en este ámbito depósitos y materiales que denotan su utilización como tierras de cultivo, implantadas sobre derrumbes y colmataciones, apreciándose incluso algunas potentes cimentaciones que posiblemente se relacionen con los vestigios de algunas de las grandes ventas y fincas rústicas que poblaron la zona desde la modernidad hasta bien entrado el mundo contemporáneo.