Biografía de reyes: Ismail I (1315-1325)

Predecesor: Nasr
Sucesor: Mohammed IV

Abu Walid Ismail, coronado como Ismail I, procedía de otra línea dinástica nazarí asentada en Málaga. Sobrino-nieto de Mohammed III e hijo de Fátima -hermana de Nasr- y de Farag, arráez de Málaga, fue criado por su abuelo el rey, quien soñaba que fuera su heredero. Aficionado a las armas y a la caza desde su infancia, obtuvo el apoyo de los meriníes y se dispuso a reforzar el ejército pues la inestabilidad en el reino se agravaba. Los escritores de su época dicen que era un hombre guapo, generoso, serio, fuerte y activo, alejado de las frivolidades y abstemio, de fe sincera y estricta moral islámica.

Dinar de oro a nombre de Ismail I
procedente de la ceca de Granada

Corría el año 1315 cuando Ismail fue proclamado rey.  La ceremonia de coronación fue fría, comparada con la de Mohammed III el último rey que accedió al trono de manera pacífica, sucesoria y legítima. Exilió a Nasr a Guadix y ordenó asesinar a su tío abuelo Mohammed III, temeroso de que reclamara su legitimidad, siendo arrojado a una alberca en Almuñecar (al-Munakkab) donde murió ahogado (otras versiones indican que fue envenenado). El pueblo aprendió a temer a Ismail pero no lo amaba.

El quinto monarca de los nazaríes se distinguió por sus actividades bélicas. De enérgico carácter, restableció la disciplina y reorganizó el ejército granadino. Las milicias africanas cuyo mando ejercía el meriní Ozmán ben Abi-l-Ula atacaron la frontera castellana quienes organizaron una poderosa expedición para contrarrestar el ímpetu musulmán. Nasr por su parte no se resigna a su nueva condición de exiliado y solicita ayuda a su amigo Pedro, príncipe de Castilla, quien manda a sus ejércitos a merodear las vegas y castillos fronterizos del reino nazarí. 

Todo ello desembocaría en la victoria de Ismail en la llamada Batalla de Sierra Elvira el 25 de junio de 1319. En el intento por conquistar Granada, los principes castellanos, Pedro y Juan, perdieron la vida en dicha batalla, junto con otros muchos caballeros cristianos. Algunas fuentes señalan que Ismail mandó a Córdoba el cuerpo del príncipe Juan acompañado por la escolta honorífica. Sin embargo el cuerpo de don Pedro fue destripado y rellenado de estopa, siendo colgado de una de las puertas de La Alhambra, toda una guerra propagandística en la Edad Media. 

Cuenta Ibn al-Jatib, el célebre polígrafo granadino, que durante mucho tiempo permaneció colgado a la entrada de la Puerta de la Explanada, conocida hoy como Puerta de la Justicia. La victoria de Sierra Elvira fue difundida como hecho memorable por todo el mundo musulmán.

Aprovechando su triunfo, Ismail atacó seguidamente las plazas de Huéscar, Orce, Galera y Baza, conquistándolas, reparando sus fortificaciones y estableciendo en ellas una nutrida guarnición. Estas conquistas que ensancharon ampliamente el territorio nazarí, consolidaron también en el trono a Ismail, cuyas proezas guerreras la ganaron la voluntad de sus súbditos.

Ismail estaba orgulloso, más fuerte que nunca, impulsándole a embellecer y engrandecer la capital de su reino, empezando por construir su propio palacio al oeste de la Sabica, cubriendo una larga zona que llegaría a convertirse en el Palacio de Comares. Edificó una torre y una qubba con una linterna central a la que se accedía por cuatro arcos de herradura, cubierta por una bóveda de gallones estucados de ladrillos rojos y tendeles blancos. Esta qubba estaría rodeada de otras estancia, unos baños, así como un aljibe el cual aún se conserva. También construyó un gran pabellon (erróneamente llamado "La Rawda") en el adyacente jardín del este y que ahora ocupa el Palacio de los Leones. A las afueras de la ciudad edificó la almunia del Alcázar del Genil aprovechando unas viejas construcciones almohades y que posteriormente embellecería su sucesor Yusuf I.

Decoración del interior de la Puerta de las Armas,
 mandada a construir por Ismail I; esta decoración
debe ser similar a la que tuviera su palacio
desaparecido tras la construcción del actual
 Palacio de Comares en la Alhambra.

En 1322 recibe la noticia de la muerte del depuesto rey Nasr en Guadix, sintiéndolo enormemente y ordenando que sus deudos trasportaran el cuerpo a Granada para honrarle como un rey, orando ante su féretro y dándole sepultura en el cementerio real de la Sabica, situado en el barranco que separa La Alhambra y la colina del Mauror, extramuros de la Bab al-Jandaq o Puerta del Barranco.

Pabellón levantado bajo el reinado de Ismail I y
que erróneamente se identifico con la
Rawda Real de la Alhambra

Además de embellecer la capital de su reino, se preocupó por preparar su ejército con una caballería excelente con caballos de pura raza árabes, una fuerte infantería e introduciendo la artillería. Con ella se dispuso a atacar la frontera del norte, en concreto Martos, en 1324, en cuyos muros logró abrir brecha, entrando a saco en la villa que pasó a poder de los nazaríes y haciendo pagar a sus habitantes todo el daño que las fuerzas del príncipe Don Pedro de Castilla le habían infringido al comienzo de su reinado. 

Pero un devaneo amoroso fue la culpa de su perdición, según cuentan los historiadores musulmanes. En dicha tropelía uno de sus altos mandos, un noble granadino llamado Mohammed ben Ismail, hijo del walí de Algeciras y primo del rey se hizo con una bella cautiva cristiana de la que el monarca se enamoró en una parada en Colomera, de regreso a la capital. Engreido y vanidoso se sentía dueño de todo y de todos, lo que le granjearía enemigos en sus propias filas.

Osmán y el despechado hijo del walí de Algeciras urdieron un complot contra el rey que tres días después de su triunfante entrada en Granada tras la toma de Martos, estando en su palacio de la Alhambra recibió la visita de su hermano, algunos amigos y de Mohammed ben Ismail. Bajo la apariencia de querer tratar unos asuntos importantes con Ismail, se acercaron a él y le apuñalaron para posteriormente escapar. La agresión fue tan rápida que quienes rodeaban al monarca no pudieron impedirla.

Todos pensaron que era un castigo divino por sus pecados pues el rey parecía tener un ogro en la entrepierna. Era insaciable y nunca le bastaron ni esposas, ni concubinas ni las esclavas de su harén. Perseguía vírgenes por todo el reino de Granada, y se encaprichaba de la primera desgraciada que le resultara de su gusto. Ismail se encontraba herido y murió delante de toda la corte alhambreña, desangrándose entre aspavientos y exhalaciones de su respiración interrumpida; su hijo de doce años, llamado Mohammed, fue proclamado su sucesor tras el asesinato de Ismail, el 8 de julio de 1325.

Comentarios

  1. Escribes unas entradas geniales, te felicito por el blog. Pero tengo una duda ¿No era Ismail I sobrino de Nasr y de Muhammad III?

    Muchas gracias

    ResponderEliminar
  2. Gracias Psoria por tu felicitación! Me alegra ver que más gente se interesa por este tema que me fascina: la historia nazarí de Granada. Sobre tu pregunta, no es de extrañar los matrimonios de lo más endogámico en la dinastía nazarí debido a su aislamiento religioso en la Península pues no tenían muchas familias reales con las que emparentarse

    ResponderEliminar
  3. Me encanta tu blog.Quisiera enconttrar algún libro con toda la Historia de La Granada Nazari que me fascina,sólo encuentro alguno pero que no abarca todo el reinado.Muchas gracias

    ResponderEliminar
  4. Muchísimas gracias Ángel por tus palabras y disculpa que haya tardado en responder a tu comentario. Te recomiendo el libro "Los Reyes de la Alhambra" de Francisco Bueno; está escrito de una forma muy amena, con datos muy interesantes y muy muy completo. Un abrazo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares

El legado nazarí por el mundo